María Bracho, Chief Technology Officer de Red Hat para América Latina
En este entorno económico de constante evolución, las empresas necesitan no solo ser competentes en su negocio, la vanguardia reside en la innovación tecnológica, integrando nuevas soluciones y herramientas para competir con éxito.
Nos encontramos en un mundo interconectado donde las barreras tecnológicas no conocen fronteras geográficas, sino que están delineadas por la capacidad de adaptarse y colaborar a nivel global. Las organizaciones que han sido exitosas en su transformación digital saben que el primer paso empieza en casa, descubriendo los indicadores claves de rendimiento, evaluando las necesidades críticas y definiendo objetivos claros.
Una vez completado este análisis, el siguiente paso es la recopilación de datos para comprender el estado actual. Este enfoque data-driven es esencial para avanzar hacia el cumplimiento de los objetivos y, al mismo tiempo, identificar procesos que puedan ser automatizados. La automatización proporciona el valor añadido de alcanzar objetivos de manera eficiente y libera el potencial creativo e innovador de la fuerza laboral, llevando así a la empresa hacia un nivel superior de desempeño. Esto es fundamental para poder beneficiarse de tecnologías populares como, por ejemplo, la Inteligencia Artificial generativa.
La innovación empresarial puede manifestarse de diversas maneras; desde la adopción de nuevas tecnologías, hasta el desarrollo de aplicaciones, la optimización de procesos, la exploración de nuevos nichos de mercado, la creación de experiencias de cliente inéditas y la colaboración estratégica con otras organizaciones.
La adaptabilidad es fundamental para afrontar cambios económicos, políticos y tecnológicos, y para ser líderes longevos, se debe contar con:
Conocimiento
- Recopilar y analizar datos sobre el rendimiento actual mediante indicadores claves.
- Identificar procesos susceptibles de automatización.
- Monitorear cambios en el mercado.
Tecnología
- Identificar áreas de inversión con impacto a largo plazo.
- Medir y ajustar basándose en datos reales y la satisfacción del cliente.
- Adoptar, adaptar y aprovechar nuevas tecnologías.
Preparación para el futuro
- Utilizar modelos predictivos para anticipar el rendimiento empresarial.
- Establecer nuevos objetivos e iterar
América Latina, una región con sus propios desafíos sociales, políticos y económicos, requiere empresas ágiles y flexibles capaces de adaptarse con rapidez. Asimismo, la colaboración en alianzas estratégicas y la definición de indicadores y tecnologías adecuados para cada mercado son imperativos para el éxito.
Las empresas líderes de hoy en día han modernizado sus operaciones mediante análisis, automatización de procesos y retroalimentación constante. El código abierto ha permitido acelerar la globalización de nuevas tecnologías e innovación. La omnicanalidad, la metodología ágil y DevOps son prácticas que no deben faltar en este camino hacia la mejora de la experiencia de usuario y la eficiencia laboral.
La preparación para el futuro depende en gran medida de la actitud ante el cambio, la agilidad de la empresa y la integración de tecnología de vanguardia. Sabemos que la inversión en tecnología es uno de los costos más grandes de una empresa, sin embargo, el éxito no se logra tratando de abarcar todo, sino adaptando la tecnología a las necesidades y recursos específicos del negocio. (I)
Fuente: Red Hat, Inc.